Powered By Blogger

domingo, diciembre 07, 2014

INNOVACION Y RIQUEZA


El capitalismo es también la competencia por hacer riqueza en medio de una multiplicidad  de actores esmerados en el éxito, que siempre tiene que ver con dinero, quienes buscan obsesivamente imponer sus ideas y productos en el mercado, atendiendo a la única regla en este sistema, que es aplastar a los demás,  hacer sus productos tan necesarios, que a los usuarios les sea imposible vivir sin ellos o por igual generar ideas innovadoras que rompan paradigmas cuya única eficacia sea la de producir dinero a granel.
Desde cuando se impuso eso que coloquialmente llaman apertura económica, globalización, libertad de mercados, competencia abierta, el mundo se volvió una jauría  de competidores voraces, ejemplo típico de este fenómeno, lo padecemos con las multinacionales, quienes cada vez monopolizan mercados, se multiplican como una plaga, nos avasallan y se nos imponen de manera total en nuestras vidas absorbiéndonos implacablemente, en lo que hacemos, como pensamos, en la manera como nos vestimos, actuamos y hasta en los sueños más íntimos, si es que la intimidad existe para estos tiempos.
Esta guerra hace que aparezcan hombres verdaderamente ingeniosos, que no solo generan ideas sorprendentes, sino productos que nadie se imaginaba hasta hace poco que fueran a existir: El internet, la red, el teléfono móvil, la automatización de casi todos los adminículos que nos rodean…para solo citar los aspectos más emblemáticos que han trasformado nuestra vida y la cual no imaginamos de otra manera.
Hacer el inventario de estos hombres es una tarea harto difícil, pero necesaria para entender el sistema en lo que se refiere a este aspecto particular, lo que nos ayudara a comprender un poco la voracidad del capitalismo.
Larry Page y Sergey Brin se conocieron en 1995, cuando tenían 24 y 23 años respectivamente, en un acto organizado por la Universidad de Stanford. Ambos tenían un objetivo en común: conseguir información relevante a partir de una importante cantidad de datos. En enero de 1996 iniciaron su colaboración en un buscador llamado BackRub. Larry empezó a trabajar en la forma de conseguir un entorno para los servidores que funcionara con PCs de gama baja y que no necesitará de potentes máquinas para funcionar. Un año después, la tecnología utilizada por BackRub para analizar los links empezaba a ser conocida en todo el campus, obteniendo una gran reputación. Era la base sobre la que se construiría Google. El nombre proviene de un juego de palabras con el término “googol”, acuñado por Milton Sirotta, sobrino del matemático norteamericano Edward Kasner, para referirse al número representado por un 1 seguido de 100 ceros. El uso del término refleja la misión de la compañía de organizar la inmensa cantidad de información disponible en la web y en el mundo.  De acuerdo al estudio BrandZ realizado por Millward Brown, Google es la marca comercial más valiosa del mundo por 193,000 millones de dólares.
Facebook nació en el año 2004. Internet empezaba a tomar fuerza en la población de a pie y la interrelación con otros usuarios del ciberespacio ya era una realidad. Era la época gloriosa del Messenger de MSN, nacido en 1999 en el seno de Microsoft. También era el momento de descubrir nuevos chats y foros de la red. En este contexto nació Facebook, una idea gestada por Mark Elliot Zuckerberg. La red social alcanzó en muy poco tiempo una popularidad nunca vista hasta el momento en el mundo de Internet. La red social está avaluada en más de 100.000 millones de dólares aproximadamente.
WhatsApp es una aplicación de mensajería freemium, para enviar y recibir mensajes mediante Internet, complementando servicios de correo electrónico, mensajería instantánea, servicio de mensajes cortos o sistema de mensajería multimedia. Además de aprovechar la mensajería en modo texto, los usuarios de la libreta de contacto pueden crear grupos y enviarse mutuamente, imágenes, videos y grabaciones de audio. La aplicación fue creada en enero de 2009, su segunda versión ―de junio de 2009― logró tener 250 000 usuarios y al 21 de enero de 2014, WhatsApp alcanzó la cifra de 54 000 millones de mensajes circulando en un solo día. En abril de 2014, el número de usuarios había alcanzado los 600 millones. Se envían 700 millones de fotos y 100 millones de vídeos cada día. Su virtud en apariencia, ser gratuita. l 19 de febrero de 2014 la aplicación fue comprada por la empresa Facebook por 19 000 millones de dólares (de los cuales 12 000 millones corresponden a acciones de Facebook y el resto en efectivo). A principios de octubre se anuncia la compra definitiva de WhatsApp por Facebook por valor de 21800 millones de dólares.
En materia de exploración y explotación petrolera, existe ahora una nueva clase rica cuya historia da para alquilar balcón: “A finales de 2009, las cosas no pintaban nada bien para Charif Souki. Cada acción de su empresa se intercambiaba a tres dólares, denostada por los inversores. Este inmigrante libanés con más de 40 años en Estados Unidos había apostado su última aventura empresarial a la importación de gas natural, convencido desde una década atrás de que el suministro energético de EE UU dependería cada vez más del exterior. Pero el gas extranjero no llegaba, mientras la producción de gas estadounidense crecía.
Cada vez más presionado, Souki decidió en junio de 2010 dar un giro radical a su estrategia: transformaría las terminales de importación a exportación de gas natural licuado. El viraje fue recibido con apatía y desconfianza por la junta directiva, los inversores y el sector. Pero en menos de dos años su incredulidad resultaría errónea: El boom energético que vive EE. UU  sitúa a su empresa, Cheniere Energy, en la cabecera del suculento negocio de la futura exportación. Souki amasó el año pasado una fortuna de 300 millones de dólares (242 millones de euros). Casi la mitad corresponde a su sueldo (142 millones de dólares), el más alto de un consejero delegado en 2013 en EE UU. Cada acción de Cheniere vale ahora 70 dólares. El de Souki, de 61 años, no es un caso aislado. Ejemplifica el auge en los últimos años de una nueva generación de multimillonarios en EE UU: el de los veteranos empresarios detrás de la revolución del fracking, la controvertida técnica de fracturación hidráulica de rocas de esquisto (shale en inglés) en el subsuelo que ha catapultado a este país a la cima de la producción mundial de petróleo y gas natural. Esto hace que los Estados Unidos pasen de importadores de petróleo a exportadoras y que el precio del petróleo haya bajado a los niveles sorprendentes de hoy.
Estas son las virtuosidades del capitalismo, que impone un darwinismo económico, que establece, quien no pueda sobrevivir al mercado desaparece, el rebaño inmenso de consumidores vive en medio de servidumbres irreductibles y las ideas exitosas se traducen en ganancias exorbitantes. Este espectáculo, debe siempre tenerse en cuenta, pues el coliseo romano del siglo XXI, será esta guerra sin cuartel.