Huellas
Una pareja venía
caminando por la sabana, en el oriente del África, mientras nacía la estación
de las lluvias. Aquella mujer y aquel hombre todavía se parecían bastante a los
monos, la verdad sea dicha, aunque ya andaban erguidos y no tenían rabo.
Un volcán cercano,
ahora llamado Sadiman, estaba echando cenizas por la boca. El ceniza ¡guardó
los pasos de la pareja, desde aquel tiempo, a través de todos los tiempos. Bajo
el manto gris han quedado, intactas, las huellas. Y esos pies nos dicen, ahora,
que aquella Eva y aquel Adán venían caminando juntos, cuando a cierta altura
ella se detuvo, se desvió y caminó unos pasos por su cuenta. Después, volvió al
camino compartido.
Las huellas humanas más
antiguas han dejado la marca de una duda.
Algunos añitos han
pasado. La duda sigue. EDUARDO GALEANO
En pleno aniversario de la muerte de Gabriel García Márquez, se no fueron
Gunter Grass, Eduardo Galeano y Ernesto Cardenal, tres grandes escritores,
quienes fueron referencia obligatoria de una época, dejaron
una obra importante para las letras universales. Toda una
pléyade de pensadores y escritores del siglo XX han venido desapareciendo,
marcando definitivamente la extinción de una generación de suma importancia en
la historia.
Gunter Grass es uno de los escritores más grandes del siglo
XX, ciudadano Alemán, sufrió todos los avatares de la Alemania en este siglo. Esta nación
estuvo comprometida seriamente en las dos guerras mundiales, generó los hechos oprobiosos
del genocidio nazi de tantos costos para su pueblo y el pueblo judio, padeció los problemas de la posguerra y tuvo la división flagrante de su territorio
gracias a la guerra fría. Hoy es una potencia comercial y política, que aún no
ha hecho una catarsis completa con su pasado, pero que gracias a novelas como “El
tambor de hojalata”, ha podido tener las herramientas para descifrar todo el
cumulo de acontecimientos, hechos que la generación de hoy tiene sometida a un proceso
de revisión histórica de suma importancia. Es un obra que desde la condición estética,
constituye un patrimonio para la humanidad, aborda el tema de la guerra de manera
magistral. En el caso personal, esta novela ha dejado huellas imborrables y de
hecho su personaje central, pese al enfrentamiento frontal que asume frente a
los hechos que vivía, me producía una especie de terror, de miedo. He leído varias
veces esta novela, además sus memorias, así como los artículos de prensa.
Gunter Grass fue un hombre polémico y como buen Alemán, de una inteligencia
abrumadora.
Eduardo Galeano es una referencia obligatoria para entender
los procesos de opresión de Latinoamérica. Fue un hombre siempre comprometido
con la situación de inequidad de nuestros pueblos y describió de manera
detallada el itinerario de explotación de nuestras riquezas en toda su
dimensión. Su prosa era impecable y de ella dan muestra los textos literarios
que son de una riqueza textual sin discusión y se dejan leer con absoluto
agrado. Era además un tipo encantador, con una conversación siempre fresca y
sus denuncias estaban por fuera de ese comunismo mamerto tan de moda en el
siglo XX. Quien puede olvidar “Las venas abiertas de américa latina”, creo que
nadie, todos leímos esta obra con absoluto asombro.
Su texto “El libro de los abrazos”, me parece de una factura
especial, escrito con el más profundo compromiso de rescatar la memoria de
nuestros pueblos desde la voz y la experiencia de sus protagonistas. La técnica
utilizada fue novedosa y le permite al lector tener fotografías en prosa, cortas,
humanas y bien hilvanadas. Cada recuento le deja a uno impertérrito, conmovido
y le suma a nuestra piel un pedazo de américa y un sentimiento de pertenencia
inolvidable. Lamentaremos mucho su ausencia. De este corte son sus libros sobre
el futbol y algunas obras más, que es preciso traer a colación en próximas entregas.
Ernesto Cardenal es el poeta de la revolución. Un nicaragüense
en todo el sentido amplio de la palabra, Su voz, entrañable, le canta a su pueblo y rescata, usa la lengua no
como un simple artificio de la memoria, sino en su condición esencial. Hay un
texto sobre su experiencia en cuba que nunca se me ha podido olvidar. Lamento
profundamente su desaparición y espero nuestros no seamos inferiores a la
grandeza de su nombre.
Esperamos que se vuelvan a publicar algunos textos de estos
tres grandes de las letras universales.
1 comentario:
Muy buen artículo. No sabía que Ernesto Cardenal había muerto y no encuentro nada en las noticias referente a su muerte.
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