A partir de esta semana todo girará alrededor de la numero cinco. Pese a todo lo que dicen, solo viviremos entorno a los resultados, los partidos. Los grandes goles serán la comidilla, el mundial es todo un fenómeno de masas inexplicable para muchos sociólogos, fácil de digerir para nosotros los aficionados.
La era digital nos permite refrescarnos antes del primer partido, con la historia de los mundiales, los mejores goles, los grandes jugadores, la historia de las selecciones. En fin con todo aquello que en algún momento nos hizo vibrar. Pocos han escapado a la emoción que brinda un gol, pero los que alguna vez jugamos, sabemos todo lo que significa meterla.
Hay goles históricos: El de pele, de cabeza frente a Italia en la final del setenta, el de Maradona con Inglaterra, la chalaca de Zico, los tiros libres de Rivelino y Roberto Carlos, los de cubillas, Cruyff…infinitos, cada vez que los vemos nos vuelve el alma al cuerpo.
Hay identidades y paradigmas por equipos: Brasil es elegancia, dominio, toque; Alemania es fuerza y orden, Italia es garra y futbol defensivo; Argentina es individualidad, genio y fuerza, Holanda es innovación…….cada selección responde a una historia.
Es cierto, el futbol es un negocio, tal vez haya manipulaciones de todo orden, pero eso ahora, es lo de menos…disfrutaremos del espectáculo, nos haremos los de la vista gorda con las cifras.
El viernes se abrirá el telón, esperaremos pacientes al primer partido y haremos la fuerza por los equipos latinos. Mí favorito es como siempre Brasil, aunque en este mundial Argentina tiene todo para ser campeon. Veremos como los técnicos organizan su arsenal, aunque es preciso recordar que numéricamente la lucha entre latinos y europeos es desigual. Amanecerá y veremos.
