He venido trabajando
desde hace seis meses la mayoría de informes presentados por “El centro de
memoria Histórica”, fundación que desde hace muchos años hace un trabajo
riguroso y serio de reconstrucción de la memoria histórica del conflicto armado
en Colombia, tiene su propio grupo de investigadores, además se apoyan en la academia, han tenido el patrocinio permanente de organismos
internacionales, en la red están a disposición una infinidad de documentos
importantes, juiciosos, trabajos monumentales del conflicto desde la
perspectiva de las víctimas, de los victimarios, del gobierno y de la propia subversión, hechos con todas las herramientas científicas disponibles, sustentados en estadísticas, apoyados en la memoria
individual de las personas afectadas, hay mucho material que lo documenta, también están los relatos de aquellos que han sobrevivido a la tragedia de la violencia y el fuego cruzado, recurren para su elaboración a todos los archivos existentes disponibles y reconstruyen desde un investigación bien direccionada, no solo los grandes
temas de nuestra atribulada realidad desde las ciencias humanas, sino
todos aquellos hechos que han dejado alguna huella. Siento que muchas personas
hablan del conflicto y no lo conocen. En YOTUBE, hay infinidad de documentales
que los exponen en un contexto amplio y polémico, pero que está a la mano de
cualquier persona. Igual trabajo hacen infinidad de ONG, las universidades que
tienen capítulos específicos en este Item. El CINEP y los trabajos desde el
ministerio de gobierno y las diferentes secretarias municipales. Cito el tema,
por qué en pleno desarrollo de implementación de los acuerdos de la Habana hay
un efervescente debate con la aprobación de la JEP y la reforma política, que inexplicablemente
fuera de la responsabilidad asumida por unos pocos actores, congresistas, hombres del
gobierno, civiles y por su puesto la academia,
quienes están seriamente comprometidos con el proceso, lo conocen y lo han
estudiado a cabalidad, excepciones sin lugar a dudas, la mayoría de colombianos no están informadas, peor,
no les interesa, solo se mueven al ritmo de las redes sociales,
manipuladas casi siempre, diría sin ambages, irresponsablemente.
El tema es importante, Colombia
está definiendo su futuro. En las zonas donde más estaba recrudecido el
conflicto, hay mucha paz y la gente vive de otra manera, pese a que el gobierno
no ha atendido estas regiones y comunidades, ha dejado vastas zonas al
garete de las Bacrim y del narcotráfico con las consecuencias que tal descuido
trae y que desafortunamente se empiezan a sentir de la peor manera.
La prensa debería estar
más informada, dejar tanta noticia mediática y asumir informes serios,
rigurosos, que sean una guía para la toma de decisiones del ciudadano común. Informar
es de suma importancia en una democracia.
No es cierto que no
haya estudios sobre nuestro conflicto. Muchos de calidad. Quien conoce su
historia no la repetirá. Espero que el congreso no se inferior a sus
responsabilidades y asume y apruebe el debate con absoluta diligencia.