Hablaré de los últimos
resultados de las elecciones de Mitaca en Colombia, así se denominaban en otros
tiempos, son a mitad del periodo presidencial, eligieron el pasado domingo
gobernadores, alcaldes, concejales y diputados, la democracia local en síntesis.
Fueron comicios con resultados rápidos, los perdedores aceptaron los mismos, lo
que habla muy bien del sistema y hubo en todas partes un abstencionismo alarmante.
La democracia funcionó desde lo formal.
En Colombia hay dos
partidos tradicionales: El Conservador y El liberal, una izquierda diezmada por
la violencia de todos los pelambres en los últimos años, representada por varias tendencias, pero cuyo
partido más emblemático es “El Polo”. Hay
dos partidos formados por coaliciones, muy fuertes, que nacieron en los últimos
diez años, cercanas al poder ejecutivo, una liderada por el presidente: El
partido de la U y otra por el ex presidente Uribe: Centro Democrático. Hay
partidos independientes nacidos de los partidos tradicionales: Cambio Radical,
bastante fuerte y con más de quince años de aparición con una cuota de poder
muy alta y una organización vertical, rigurosa en cabeza del expresidente
actual, nació del partido liberal, Progresistas, nacida del Polo, verdes, y muchas industrias electorales: Mira,
Convergencia..etc,ect
Las elecciones en
Colombia continúan en gran parte manejándose por sistemas clientelistas, en esta contienda, de nuevo hubo dinero
desmedido, la gente no se informa y la publicidad es el medio y el fin, se
dieron muchas sorpresas, pero al final la clase política, sigue manejando los
hilos del poder en las grandes capitales y de manera elocuente en los municipios pequeños, casi
siempre ganaron los varones electorales.
Dos cosas importantes:
Hay una generación entre 18 y 35 años, des-politizada completamente, no le interesa para nada la participación en
la política y lo que es peor, se siente orgullosa de estar lejos del sistema. Cumple
con el estado, pero su escepticismo por todo lo que tenga que ver con la
política es radical.
La otra, la red y las
TIC, herramientas de suma importancia
dentro de los procesos que buscan implementar la trasparencia y participación en
estos procesos, paradójicamente, terminaron siendo plataformas para las
propagandas negras, manejadas por expertos en estas materias, sirvieron como
mecanismo intimidatorios.
Las sociedades
liquidas, aún están lejos de articularse con la política en el más literal
sentido Aristotélico. Esta generación no ha comprendido que la política es la
única manera de oponerse o ser dentro del sistema, es imposible desconocer que
existe el mecanismo, decide sobre absolutamente todo.
Y por último, murieron
los líderes y los discursos, la palabra perdió peso específico, esas piezas
magistrales son cosa del pasado. Ya no hay un hombre que cohesiona a este país.
Los partidos se opacan, no tienen fuerza y muchos jóvenes no tienen ni idea
sobre ellos. Por último, este país se está quedando sin memoria…a las nuevas
generaciones para nada les preocupa el pasado. Estamos en la época del ya y el
ahora.