CANDIDATOS PARA TIEMPOS DIFICILES
En una columna anterior frente a las nuevas elecciones decía que estas no constituyen la simple alternación de alcaldías, gobernaciones, concejos y asambleas. Es mucho más que eso. Se está reconfigurando el poder en medio de una de las situaciones más atípicas de Colombia, que representa una crisis sin paralelo, donde los actores en conflicto política y socialmente involucrados, le están mostrando sus cartas a la sociedad sin ningún tipo de velo, ni mentira: los paramilitares se asumen como tal, no ocultan sus relaciones con el narcotráfico, ni niegan sus asesinatos; la guerrilla, le habla a la sociedad de intercambio humanitario, reconoce que retiene o secuestra civiles y de alguna manera deja ver sus relaciones con el narcotráfico; Una gran mayoría de políticos, congresistas y funcionarios públicos, gracias a la acción de la justicia han reconocido las relaciones no santas con el paramilitarismo, el narcotráfico y la participación en política apoyados por grupos de presión e incluso asesinatos; el gobierno frente a esta encrucijada, no tiene una política de orden público clara y una ruta de resolución general, que involucre a la totalidad de los actores en cuestión frente a tan atribulado panorama y a la vez, de acuerdo a la política de justicia y paz, la sociedad afectada por el conflicto, obtenga su cuota de resarcimiento y verdad.......En fin. Cada una de las partes involucradas en este galimatías, quiere continuar participando del poder, ahora de manera visible y no están dispuestos a desaparecer de ninguna manera, muy a pesar que la ley así lo establece. Las elecciones de octubre constituyen el escenario ideal para mostrar sus fuerzas. Los paras, la clase política aliada a los mismos, la guerrilla, que hasta ahora parecían estar manejando los hilos del poder desde la invisibilidad………. quieren hacerse participes del mismo si ningún tipo de disfraz, e incluso trabajan para redimensionar y reinterpretar, el papel que jugaron en la historia Colombiana, desde una perspectiva nueva. Súmele a la lista el partido liberal, el partido conservador y la alternativa seria en que se encuentra la izquierda con el polo a bordo, como factor de poder. Ahora, si miramos el poder como una relación de fuerzas, una situación estratégica en una sociedad determinada y a la sociedad y el individuo como sujetos atravesados por estas relaciones de poder ( Foucault ), Colombia esta en momento absolutamente crucial. Cual debe ser el perfil de los nuevos burgomaestres para estos tiempos. Sobra decir que a la honestidad, el conocimiento, la trayectoria, la capacidad, hay que sumarle condiciones especiales para los momentos especiales que vive el país, para no hablar de ciertas regiones atípicas, las cuales requieren un tratamiento sui generis. Los políticos modernos, ahora más que nunca, requieren ser verdaderos lideres, con visión, capaces de gobernar no solamente para el presente, sino pensando siempre en apalancar las ciudades al futuro y por ello deben tener la suficiente fuerza para aglutinar la variopinta gama de potencialidades y necesidades que cada región reúne, dentro del marco de una economía globalizada y donde cada ciudad-región está sometida a presiones ( Competitividad tenaz, economía global, flujos de dinero ) por fuera de su propio espacio, que paradójicamente las afecta sustancialmente. Fajardo es un excelente ejemplo de lo que debe ser un líder. Pensar, planificar y ejecutar, el trípode sobre el cual monto su gobierno, estuvo acompañado de un discurso claro, convincente, coherente, acompañado de una excelente política de medios y comunicación, donde cada tema lo aborda no solamente sobre la propia coyuntura que el mismo exige, sino con visión de largo plazo. Cuando habla de educación, lo hace, para citar un ejemplo, desde la perspectiva específica de los problemas presentes, pero con soluciones de largo plazo y ajustada a las necesidades de una economía muy competitiva y exigente. Es en esencia, eso que llamamos, el político para los tiempos presentes. El reto, para cada ciudad y municipio, es escoger el mandatario acorde a los tiempos y reconociendo el momento que vivimos. Amanecerá y veremos.
En una columna anterior frente a las nuevas elecciones decía que estas no constituyen la simple alternación de alcaldías, gobernaciones, concejos y asambleas. Es mucho más que eso. Se está reconfigurando el poder en medio de una de las situaciones más atípicas de Colombia, que representa una crisis sin paralelo, donde los actores en conflicto política y socialmente involucrados, le están mostrando sus cartas a la sociedad sin ningún tipo de velo, ni mentira: los paramilitares se asumen como tal, no ocultan sus relaciones con el narcotráfico, ni niegan sus asesinatos; la guerrilla, le habla a la sociedad de intercambio humanitario, reconoce que retiene o secuestra civiles y de alguna manera deja ver sus relaciones con el narcotráfico; Una gran mayoría de políticos, congresistas y funcionarios públicos, gracias a la acción de la justicia han reconocido las relaciones no santas con el paramilitarismo, el narcotráfico y la participación en política apoyados por grupos de presión e incluso asesinatos; el gobierno frente a esta encrucijada, no tiene una política de orden público clara y una ruta de resolución general, que involucre a la totalidad de los actores en cuestión frente a tan atribulado panorama y a la vez, de acuerdo a la política de justicia y paz, la sociedad afectada por el conflicto, obtenga su cuota de resarcimiento y verdad.......En fin. Cada una de las partes involucradas en este galimatías, quiere continuar participando del poder, ahora de manera visible y no están dispuestos a desaparecer de ninguna manera, muy a pesar que la ley así lo establece. Las elecciones de octubre constituyen el escenario ideal para mostrar sus fuerzas. Los paras, la clase política aliada a los mismos, la guerrilla, que hasta ahora parecían estar manejando los hilos del poder desde la invisibilidad………. quieren hacerse participes del mismo si ningún tipo de disfraz, e incluso trabajan para redimensionar y reinterpretar, el papel que jugaron en la historia Colombiana, desde una perspectiva nueva. Súmele a la lista el partido liberal, el partido conservador y la alternativa seria en que se encuentra la izquierda con el polo a bordo, como factor de poder. Ahora, si miramos el poder como una relación de fuerzas, una situación estratégica en una sociedad determinada y a la sociedad y el individuo como sujetos atravesados por estas relaciones de poder ( Foucault ), Colombia esta en momento absolutamente crucial. Cual debe ser el perfil de los nuevos burgomaestres para estos tiempos. Sobra decir que a la honestidad, el conocimiento, la trayectoria, la capacidad, hay que sumarle condiciones especiales para los momentos especiales que vive el país, para no hablar de ciertas regiones atípicas, las cuales requieren un tratamiento sui generis. Los políticos modernos, ahora más que nunca, requieren ser verdaderos lideres, con visión, capaces de gobernar no solamente para el presente, sino pensando siempre en apalancar las ciudades al futuro y por ello deben tener la suficiente fuerza para aglutinar la variopinta gama de potencialidades y necesidades que cada región reúne, dentro del marco de una economía globalizada y donde cada ciudad-región está sometida a presiones ( Competitividad tenaz, economía global, flujos de dinero ) por fuera de su propio espacio, que paradójicamente las afecta sustancialmente. Fajardo es un excelente ejemplo de lo que debe ser un líder. Pensar, planificar y ejecutar, el trípode sobre el cual monto su gobierno, estuvo acompañado de un discurso claro, convincente, coherente, acompañado de una excelente política de medios y comunicación, donde cada tema lo aborda no solamente sobre la propia coyuntura que el mismo exige, sino con visión de largo plazo. Cuando habla de educación, lo hace, para citar un ejemplo, desde la perspectiva específica de los problemas presentes, pero con soluciones de largo plazo y ajustada a las necesidades de una economía muy competitiva y exigente. Es en esencia, eso que llamamos, el político para los tiempos presentes. El reto, para cada ciudad y municipio, es escoger el mandatario acorde a los tiempos y reconociendo el momento que vivimos. Amanecerá y veremos.
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