Por primera vez en más de 100 años es elegido un presidente de izquierda en Colombia. En nuestro país, por razones diversas, la izquierda nunca había llegado al poder. Las razones son muchas, desde divisiones internas, llena de matices, históricamente sin electorado, con muchas tendencias y líneas irreconciliables; hasta la actitud recalcitrante de una derecha que los fue eliminando cada vez que fueron una opción de poder real; o simplemente por ser una país tradicional y conservador en el fondo. Esto significa retos inconmensurables, pues por primera vez, han llegado al poder, con una representación importante en el congreso y con una plataforma social de cambio que, fue atendida por un electorado joven, nuevo, que no le perdono a los partidos tradicionales tantos años de poder sin ninguna política de cambio real.
En "El pacto histórico", partido del presidente hay de todo como en botica. Representantes de los partidos tradicionales, del Santismo, de las negritudes, de las etnias y lideres de la izquierda que vienen trabajando por un cambio desde hace muchos años. No será fácil gobernar con esa gama de matices e intereses, supongo que todos están sumados al poder alrededor de un programa de gobierno que se ha consensuado. Una cosa es la campaña y otra el manejo del poder, donde se requiere conocimiento de la administración pública, técnicos, políticos avezados y voluntad de poder para producir los cambios prometidos, sin caer en los mismos errores de siempre. El solo nombramiento de una burocracia necesaria, pues uno gobierna con los pares, hace que el ojo del presidente este alerta de no caer en las milemetrias del poder acostumbradas.
Será un gobierno de unión nacional, hasta ahora el presidente electo ha hablado con todos los cuadros de poder tradicionales, supongo que armando mayorías que le permitan implementar su programa. Peligroso de antemano, pero es muy temprano para prender alarmas al respecto. El nombramiento de ciertos ministros le ha permitido despejar dudas sobre el miedo a terminar implementando cualquiera de las medidas de la irresponsable política venezolana que tanto daño le hizo al país hermano en 20 años de gobierno. Sí algo se precia en este país es la institucionalidad y el hecho de estar sujetos a una constitución que no es fácil cambiar locamente.
Espero lo mejor de este gobierno y que responda a la política social prometida, al desarrollo sostenible, a la búsqueda de energías alternativas, al incentivo de las oportunidades y a la promoción de la educación en todos los niveles como factor de desarrollo.
1 comentario:
Esperamos que no comience la expropiación como lo había prometido. Recuerde que este es un líder latinoamericano, mejor que el de chile, Ecuador, Perú, Venezuela, Nicaragua y México. El no puede darse el lujo de ser diferente a los otros. Lo de concertación con los otros partidos es mentira. "Del dicho al hecho hay mucho trecho", PARA que nos digan que va a ser diferente. Eso no lo puedo creer.
Los jóvenes se lamentarán un día: Ya no habrá tiempo, pues este presidente se montará como dictador, es el caso de Nicaragua y Venezuela. La vicepresidente viene d3l ELN o sea que es guerrillera. Eso es lo que siempre han querido, qué va hacer Ahí lo tienen, que va hacer de ellos, los jóvenes, nada, porque ya no tienen tiempo. Su trabajo y sueldo quedan en veremos. Eso querían, eso tienen. Ojalá me equivoque.
Publicar un comentario