El Mundo continúa en una de las peores crisis económicas de la história y el
principal reto será empezar a superarla seriamente. Con la aprobación del
presupuesto de la comunidad económica europea, está descontado que se empieza a
salir de la misma. Alemania cedió y ahora están a la mano los instrumentos que le
permitirán a los países más débiles tener el colchón monetario para
empezar a solucionar sus problemas más graves. Resulta paradójico que sea
con el sacrificio de la clase media y sin solucionar el lío mayor del
desempleo. Ahora el reto es reactivar su economía y aumentar su productividad. Para Norteamérica, con la aprobación de la
ley que soluciona su déficit fiscal el último día del año, después de una puja partidista sin
precedentes en el congreso, se evitó un colapso de proporciones mayores. Obama
ha impuesto de alguna manera su agenda social y este año continuara con
reformas en este rango que le volverán a enfrentar a los republicanos. Los
americanos pese a no salir de la crisis, tienen mejores posibilidades de
empezar a aumentar su productividad y exportaciones, El manejo del dólar les
permite tener un instrumento monetario muy ventajoso. China seguirá creciendo a
tasas superiores al cinco por ciento, luego se mantiene junto con los Estados
Unidos como la gran locomotora del mundo. Japón, quien se está recuperando de
su larga crisis, mantendrá su crecimiento y sí logra arreglar el problema del
consumo interno, por fin volverá a ser la potencia comercial de otros tiempos. Nada
de esto significa alguna salida real a los grandes problemas sociales. Latinoamérica
deberá mantener sus índices de crecimiento, con Perú y Chile a la cabeza, que
le permita atender la inequidad persistente. Venezuela amerita un caso
especial, por razones de todos conocidas, la enfermedad de su primer mandatario, la revolución tendrá que sobrevivir sin su líder,
este será su principal tarea.
Será el año con mayores trasformaciones en la acción política gracias a
las redes sociales. Pese a lo gaseoso en apariencia de estos flujos, de hecho han cambiado
totalmente la forma de expresión y de acción política en el mundo. Constituyen una
verdadera revolución. Las TIC continúan siendo muy importantes y no se entienque que
muchos políticos y partidos no lo hayan asimilado las virtudes de este instrumento.
El cierre de periódicos en su versión impresa no es una opción sólo económica
sino una flagrante realidad frente a la revolución de las TIC. Se incrementará su uso
y se impondrá la lectura y la información a través de la red. Lo mismo pasará
con los libros y la lectura en general, es claro que la publicación en
este formato sobrevivirá por mucho tiempo.
Países como Brasil, La India, los tigres Asiáticos, mantendrán su lucha
comercial, pero con lo visto el año anterior,
quedó demostrado que no es fácil.
Es definitivo, el capitalismo está en cuestión y la academia y grandes
pensadores continúan el proceso de desciframiento de los que sucede. Marx volvió a la
palestra y es quien mejor describe el modelo. Lo grave,
es que no vemos que pueda remplazar al modelo, pese a lo injusto. La discusión es larga y variopinta. En todo caso,
este año no es fácil y por la s medidas tomadas por la mayoría de gobiernos, la
peor parte la tiene la clase media.
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